La economía circular da forma a las habilidades futuras necesarias en la industria del envase de plástico

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La industria del envase de plástico está cambiando de forma rápida. En Finlandia, el taller realizado en abril, dentro del ámbito del proyecto PackAlliance, se centró en la competencia de los operadores de envases de plástico en su camino hacia la economía circular y la capacitación necesaria durante los próximos diez años.

La coordinadora del taller y profesora Nina Kukkasniemi (Universidad de Tampere of Applied Sciences) comentó que es necesario debatir y trabajar juntos en temas como: ¿Cuáles son los nuevos materiales? ¿Cómo diseñar y producir de una manera ecológica? ¿Cómo se puede reducir la carga ambiental y el uso de recursos? ¿Cómo involucrar al ciudadano en el reciclaje y el pensamiento ecológico? ¿Cómo convertimos los residuos de envases en nuevas materias primas y productos de alto valor añadido?

La legislación sobre plásticos está cambiando, la UE está valorando establecer un impuesto a los plásticos, y el programa de economía verde sugiere la promoción hacia una economía circular que restrinja los productos desechables siguiendo la regla de las 4 “R”, es decir, reducir, reutilizar, reciclar y recuperar. Reijo Kauppi (Pyroll) dijo que el plástico es una materia prima valiosa también después del final de su uso real y que debe tener en cuenta el potencial de los residuos, la capacidad de reciclaje, la huella de carbono, la reutilización y las materias primas renovables. Él, agregaría a las 4 “R” 2 más, repensar y renovar. Antro Säilä, CEO de la Asociación Finlandesa de Envases, subrayó la necesidad de aumentar el reciclaje de los materiales en toda la sociedad y destacó el cambio en la actitud hacia los plásticos motivada por el coronavirus, puesto que los productos envasados ​​son una de las mejores formas de evitar el virus.

Finlandia está bien posicionado a nivel europeo en la recuperación de residuos en materias primas, pero su debilidad es la falta de pragmatismo en la legislación educativa, y los métodos de enseñanza deben ser reformados. La directora del proyecto, la profesora Marita Hiipakka, dijo que, durante el proyecto, los estudiantes también colaborarán con las empresas y ayudarán a resolver problemas reales para las empresas. Jarmo Aspelin, Director Gerente del Grupo Aspelin, anima a todo el sector a hacer que el reciclaje de plásticos sea lo más simple posible tanto a nivel nacional como europeo, con el fin de mejorar la imagen general de los plásticos. El proyecto PackAlliance creará una red de centros europeos, donde la cooperación se incentivará más.

En el taller, participaron veinte profesionales de diferentes empresas referentes del sector del envase del plástico. Fueron invitados a completar un esquema de análisis DAFO para identificar las necesidades de habilidades para cuatro temas identificados en el proyecto: nuevos materiales y biomateriales; ecodiseño y nuevos procesos de fabricación; interacción ciudadana y eco-marketing; y gestión y reciclaje de residuos de envases de plástico.

Los participantes sienten que existe una necesidad de comprender los distintos tipos de plástico, su uso y reciclabilidad a nivel mundial. La diseñadora Eija Syrjämäki, resumió cómo el conocimiento se comparte en las redes internacionales. El grupo discutió sobre la reducción drástica en las últimas décadas en educación sobre plásticos. Sauli Eerola (Muovipoli Oy) dijo que debía mejorar la educación en torno a los envases de plástico para promover el desarrollo del reciclaje y la adquisición de bioplásticos. Los participantes ven la falta de una terminología común entre los profesionales del campo y recomiendan adoptar instrucciones comunes y claras sobre cómo reciclar los envases y cómo comunicarlo a los consumidores. Los medios juegan un papel importante en el intercambio de información veraz. El desarrollo de nuevos materiales por sí solo no es suficiente, también se necesita mejorar la tecnología para la reutilización del plástico. Los estudiantes deben jugar un papel activo en innovación. Las líneas de producción ya establecidas suponen un freno al cambio de políticas orientadas en la sostenibilidad. En la toma de decisiones políticas se debe apostar por políticas que incentiven el cuidado del medio ambiente. Situaciones excepcionales, como el coronavirus, demostraron que el reciclaje mecánico puede ser un desafío bajo circunstancias excepcionales.

Finalmente, en cuanto al talento, la expectativa más importante es la comprensión completa de la cadena de valor. El pensamiento del ciclo de vida, la competencia colaborativa y las habilidades de intercambio de conocimientos deberían estar en el centro de los futuros aprendizajes de la fuerza laboral